La Asociación Panameña de Ejecutivos de Empresa, APEDE, instituyó cada 10 de agosto como «El Día de Fernando Eleta Almarán», en conmemoración de su natalicio 95 y por ser el primer presidente y fundador del gremio, y así honrar su memoria, legado y liderazgo, pues fue un hombre de sólidos valores y principios que edificaron los cimientos de la historia Apedeana y que han constituido su organización.
Para Juan Gabriel González, presidente de la APEDE, esta directiva ha propuesto una nueva frontera que todos los miembros deben juntos forjar hacia una APEDE acorde a las exigencias del siglo XXI, moderna e innovadora en ideas y a que su vez las mismas los lleven a realizar acciones concretas, que les permitan mantenerse vigentes en el tiempo, con pensamiento crítico y renovador al servicio de la nación.
«Estoy consciente que nada seríamos sin una sólida base de experiencias y propuestas que han trascendido de generación en generación y que hoy, después de 58 años su legado sigue vivo y su ADN intacto, tal como fue el propósito trazado por su primer presidente y fundador Don Fernando Eleta Almarán», destacó González.
En el acto se promovió el legado y compromiso de Fernando Eleta Almarán, juntos a los demás fundadores del gremio, quienes fueron hombres y mujeres adelantados a su época, que no solo vieron en los ejecutivos de empresa ejecutivos alejados del acontecer nacional, encerrados en sus propios negocios, sino que se convirtieron en los ejecutivos de empresa forjadores del pensamiento empresarial transformador, pues tenían el firme propósito de que el legado que dejarían en APEDE, fuera recordado, reconocido y promovido por la sociedad, por ser el ente de referencia y por excelencia de los temas nacionales que preocupan al país y a su vez valorado en su esencia por todos los que compartimos esta misma visión y misión de llevar ese legado a las siguientes generaciones de Apedeanos.
Correspondió al expresidente del gremio, Roberto Alfaro presentar la historia de la vida de Fernando Eleta Almarán al servicio del país, desde el sector privado, y público. Por otro lado su hija, Mercedes Eleta de Brenes, concluyó en sus palabras de agradecimiento, recalcando que su papá siempre tuvo como norte dejar un legado.
