Panamá, 04 de octubre de 2023. “La discapacidad es el dueño de todas las etiquetas, por eso es el momento de dignificar y normalizarla”, este fue uno de los fragmentos que plasmó Vivian Fernández de Torrijos durante su disertación titulada “Inclusión de las personas con discapacidad”, un conversatorio organizado por nuestra Comisión de Sostenibilidad, Mujer e Inclusión.

La Comisionada experta por los Derechos Humanos de las personas con discapacidad ante las Naciones Unidas (ONU), Ginebra, reveló que existe un problema de data en todos los países, ya que hay familias que ocultan el tema discapacidad. A su vez, indicó que en 2006 se practicó un estudio de prevalencia en Panamá, el cual arrojó que hay cerca de 374 mil personas con discapacidad, sin embargo, el último censo de Población y Vivienda realizado por la Contraloría General de la República, apunta a una cifra de 54 mil. Ante esto, comentó que de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la ONU, estiman que un 15% de la población total del país tiene discapacidad, por lo que la cifra no es certera.

Fernández de Torrijos hizo referencia al término “Ableismo” (en inglés Ableism), que se define como la discriminación contra las personas con discapacidad basada en la creencia de que las habilidades típicas son superiores; puede manifestarse como una actitud, un estereotipo o un comentario ofensivo de los cuales muchas veces son hechos de manera inconsciente.

Enfatizó que la inclusión de personas con discapacidad no comienza en el lenguaje, pero construir un mundo con ellos adentro si requiere que cambiemos nuestro lenguaje, puesto que las palabras pesan y se debe ser cuidadoso antes de preguntar o comentar sobre diversidad como, por ejemplo: “Oye, que bien actúa tu hijo, te juro que ni parece que tiene autismo”.

La discapacidad ha tenido diversos enfoques a lo largo de la historia, algunos de ellos son:

1. El modelo religioso: Bajo este modelo, las personas con discapacidad eran vistas como un pecado, un castigo de Dios o un Karma.
2. El modelo médico: La persona con discapacidad es vista como un “problema” y necesita tratamiento para ser curada. Con este modelo inició la educación especial, instituciones especiales, talleres protegidos, transporte especial, etc.
3. El modelo “Charity”: Este modelo trata a la persona con discapacidad como un dependiente de la sociedad, son tratados como víctimas indefensas que necesitan atención y protección; se basa en gran medida en la caridad y la benevolencia en lugar de la justicia e igualdad.
4. El modelo de Derechos Humanos: Promueve la creación de comunidades que acepten diversidades y diferencias; este modelo afirma que todos los seres humanos, independientemente de su discapacidad, tienen derechos, respeta la autonomía y la libertad de elección, se centra en la igualdad y la no discriminación. Se ve a la persona con discapacidad como sujeto y no como objeto.
5. El modelo económico: Este modelo trata de establecer un vínculo entre individual y la sociedad en términos de su contribución a las capacidades productivas hacia la comunidad. Este sugiere modificaciones en la persona en la forma de educación, capacitación y empleabilidad, en lugar de cambiar el entorno.

La experta recalcó que vivimos en tiempos de etiquetas, todos estamos divididos en esta sociedad y existe una discriminación diaria. Necesitamos un mundo más diverso y respetable.

Desde la perspectiva de Fernández de Torrijos, Panamá no necesita una ley más en materia de discapacidad, “lo que necesitamos son gobernantes que las cumplan, un Ministerio de Economía y Finanzas que brinde mejor presupuesto, campañas de sensibilización diarias, rampas, educación inclusiva y mayor respaldo del sector empresarial. Necesitamos conciencia, valores y tener gobernantes con la disposición y voluntad de hacerlos entender que el modelo médico ya pasó”, ripostó.

Por su parte, el presidente de la Asociación Panameña de Ejecutivos de Empresa (APEDE), Temístocles Rosas, instó al sector empresarial a evangelizar sobre la inserción laboral de personas con discapacidad, para así ver las capacidades que poseen y determinar en qué puestos ubicarlos.